Tras largos meses de preparativos (comprar material, elaborar listas, valorar diferentes posibilidades y sobretodo algo de angustia al imaginar el día del "fuego real") llegó el día de la verdad:
Unos días algo difíciles con contracciones sin que se adivinara el final feliz. 15h en sala de dilatación y un parto tan rápido que por poco no llego a ver nada


La madre se encuentra bien (dentro de lo que cabe tras el parto) y la pequeña ya ha conquistado a su padre y lo ha convertido en esclavo

Vuelvo al hospital. La partida acaba de empezar. Saludos
Massena