Aqui un sitio reservado para los mensajes que no tienen porque ser de estrategia. Siempre respetando las normas generales de conducta y la buena educación, ante todo.
Un placer leerlo, caballero. Gracias por su labor y que sí, qué cojones... ¡que sólo lo leamos de nuevo y bien por estos lares cuando su señora esposa licencia le de... en el buen sentido !
Gritó dos veces, un grito no más fuerte que una exhalación: ¡El horror! ¡El horror!