TURNO 13
Semana del 11 al 17 de Septiembre.
En cierta ocasión Stalin en una de sus reuniones o mejor dicho monólogos que mantenía con su fiel Voroshilov dijo que la artillería era para él, el dios de la guerra. Una manera muy gráfica de describir la realidad del combate. Una realidad que nosotros descubrimos con cruel dureza.
Una vez fuimos rescatados del cerco al que fuimos sometidos por el ejército rojo, nos vimos sometidos a una nueva contraofensiva soviética, mucho más aterradora y devastadora que la anterior.
Ante nosotros se reunió un nuevo ejército, el cual desató todo su poder sobre nuestras castigadas y cansadas fuerzas. El asalto vino precedido por el fuego aplastante de más de 700 cañones y morteros de todos los calibres. Nuestras baterías apenas pudieron responder, los 731º y 800º batallones de artillería, así como el I/54 de Nebelwerfer que nos apoyaban sufrimos la pérdida de más de 45 piezas en el huracán de fuego de contrabatería que se desencadenó.
Una vez fueron silenciadas nuestras baterías, el fuego ruso se concentró sobre nuestra infantería.
Cuando eres objeto de un martilleo así en campo abierto, se invade un profundo sentimiento de miedo y angustia, algunos hombres, incluso, enloquecen, lo que no es de extrañar, pues no hay refugio ante tal Armagedón. Las bajas fueron enormes, muchos de los heridos habían sido mutilados por la metralla, otros cuerpos simplemente desaparecieron al recibir un impacto directo.
Minutos antes que terminara el fuego de barrera, se abalanzó sobre nosotros, de forma escalonada todo el 12º Ejército ruso; 2 divisiones de rifles, otras dos de caballería y la 60ª Div. de montaña. Sin embargo el asalto no se encontraba bien coordinado y no despedazó nuestras líneas. El 1º y el 2º Batallón aguantó el envite de las dos divisiones de rifles y nuestro 3er batallón el de las dos divisiones de caballería, sin embargo la llegada de la 60 de montaña arrasó nuestras defensas y las de la 11ª kompanie. De nada sirvió la apresurada llegada 6 Stug a nuestro auxilio. 38 fueron las bajas que hube de lamentar en mi amada 12ª kompanie, 20 de ellos muertos. Pedí, no….. rogué al mando de la Brigada el permiso para replegar mi unidad, permiso que fue concedido al recibir orden toda ella de largarse de ese infierno.
Lo hicimos en perfecto orden, éramos profesionales….. pero nos afectó mucho no poder enterrar a nuestros muertos. Me acordaba de todos ellos, grandes chicos, grandes soldados.
Las bajas de la brigada fueron aterradoras….
No obstante no había tiempo, ni tan siquiera de lamernos las heridas. Nos reabastecieron…. limitadamente, como de costumbre y recibimos orden de nuevo de avanzar….. un par de días fue el único descanso que recibimos.
La situación en el frente requería energía y dinamismo, si queríamos que la 2ª fase de la operación Prometeo tuviera esperanzas de éxito.
El plan era, de nuevo arriesgado y nosotros, de nuevo eramos los elegidos para ser, de nuevo, los protagonistas de las operaciones.
Se debía cruzar el rio al norte de Dnepopretrovsk con el fin de capturar los pantanos que cubrían todo el dispositivo de defensa del Dniepr, una vez saltara todo ese cerrojo, el 17º Armee podría continuar apoyando nuestro flanco sur de avance. El 6º Arme por su parte continuaría manteniendo el esfuerzo contra Kharkov, simplemente con el fin de cubrir el flanco norte del panzergruppe.
El objetivo que se nos encomendó fue ampliar la cabeza de puente que había abierto el XLIX Gebirgskorps. Era como si el mando nos hubiera concedido el parabién de la venganza, pues nos enfrentaríamos a uno de nuestros verdugos en la batalla pasada, a la 60ª Div. de montaña. No iríamos solos, la 25ª Mot. Div nos acompañaba, precedida del 191º Stug Battalion y los Panzerjager del 652º Battalion. Sobre nuestras cabezas rugían los motores de los bombarderos de la IV Luftflotte, 120 bombarderos y 138 cazas, que barrieron del cielo todo vestigio de oposición.
Aún asi la batalla fue muy dura, pues la división rusa contaba con dos fuertes regimientos de artillería. Nuestras bajas ascendieron a 339 bajas entre las dos unidades, un peaje alto dada nuestra concentración de fuego, sin embargo, las más de 920 bajas causadas al enemigo y la captura de su valioso territorio fue buena recompensa.
Esto demostraría a nuestro rival, el mariscal Bletchkov que no se podía jugar con nosotros como si nada.
Tras las durísimas batallas a lo largo de la semana, habíamos conseguido alcanzar nuestro objetivos, ahora cabe preguntarse, ¿Continuarán los ejércitos soviéticos aferrados al Dniepr ahora que su flanco norte ha saltado en mil pedazos?, ojalá si, pero ninguno de los miembros de la oficialidad del III SS Battalion pensamos que así vaya a ser. Bletchkov es perro viejo y no arriesgará a sufrir un flanqueo de todo un panzergruppe. Por su parte el 6º Armee siguió a un alto coste el avance hacia Kharkov, su misión de amarrar a un buen número de tropas rusas fue cumplida a la perfección manteniendo un buen ritmo de avance.
Los nuevos refuerzos que, a él, serían asignados en un par de semanas, sin duda, romperían el frente. Nadie nos dijo de que se componían, era sin duda, un secreto operacional de la más alta importancia.
Más hacia el sur nos llegaron noticias muy importantes del 11º Armee;
Según las últimas noticias, el LIV Armee korps había perforado la zanja Tártara que defendía el estrecho de Perekop en Crimea. Y sobre su brecha se lanzó en tromba la 1ª Bgda mot. SS causando el más alto caos en la retaguardia soviética, campos de aviación y cuarteles generales rusos tuvieron que ser evacuados con la mayor celeridad, dejando sobre el terreno una buena cantidad de suministros que la brigada aprovechó a la perfección.
Por su parte el XXX Armeekorps continuó hace el segundo itsmo defensivo de la vital península.
Ante la necesidad de dar una mayor cobertura de flanco al 11º Armee, el alto mando decidió enviar al XI Armeekorps a conquistar la ciudad de Melitopol, misión que cumplió sin problemas. Con el fin de reforzar el mordiente perdido del ejército por la anteriormente mencionada operación , se decidió asignar a su mando al cuerpo de montaña rumano al completo.
En el sector del 4º Ejército rumano,y tras su funesta operación pasada, Runstedt ordenó esperar a Antonescu esperar los refuerzos enviados, es decir, el 369 Infanterie regiment y la 1ª div. de infantería rumana. El 38 Ejército ruso de Odessa tendrá que esperar una semana más el asalto del eje. El golpe, esta vez será definitivo.
En el resto de sectores del frente, las situación del frente era dispar. Nuestros kameraden de transmisiones nos informaban puntualmente de lo sucedido, si bien es cierto que sin demasiadas precisiones.
El Heeresgruppe nord, continuaba cosechando éxito tras éxito. Al parecer el 4º Panzergruppe había conseguido atraer para si un buen numero de refuerzos soviéticos que no serían enviados a moscú, mientras tanto el L Armee korps del 18º Armee destrozaba las defensas soviéticas, estableciendo una cabeza de puente en el Neva sobre la que se lanzó impetuosamente el XLI Panzerkorps de Reinhardt. Leningrado estaba condenada, dos semanas más serían necesarias para su captura. Se esperaba que eso fuera suficiente para que los Finlandeses, se decidieran por fin a continuar la guerra.
La ofensiva más allá del Volchov se continuó, era imperativo no dar respiro a los defensores soviéticos. La ciudad y el nudo ferroviario de Tikhvin eran el objetivo clave.
Más al sur, el 16º Armee tomaban prácticamente sin lucha las importantísimas colinas Valdai, sin duda un gran lugar para pasar el invierno….
Estoy seguro que abandonar tan importante posición fue una decisión dura para el mando soviético, que duda cabe que obró bien, puesto que un giro al sur del 4º Panzergruppe, sin duda habría cercado a los ejércitos congregados en el rio Pola.
Sin embargo se debía continuar hacia delante, pues la crítica situación del Heeresgruppe Mitte se tornaba decisiva.
La penetración panzer que había llevado a cabo Guderian con su 2º Panzergruppe la semana pasada se había vuelto en contra. Una masa de infantería y caballería soviética organizó un terrible contraataque que cercó por completo el panzergruppe. Mientras que Hoth continuaba empantanado al sur de Rhzev.
La situación era sin duda difícil, posiblemente crítica, sin embargo el reconocimiento aéreo de la Luftwaffe nos reveló que salvo excepciones las divisiones soviéticas no se encontraban a pleno potencial. La infantería del 9º y del 4º Armee deberían hacer el esfuerzo más complicado y difícil. El objetivo no era otro que seguir presionando y si las defensas soviéticas se mantenían adelantadas, cercar a un ejército soviético y medio de espaldas al Moskova.
Yo no me engañaba, tantas semanas de campaña me habían enseñado que una amenaza de cerco tan obvia no podría ser ejecutada, pues el mariscal Bletchkov daría orden de repliegue….. ¿donde estaban las supuestas órdenes de Stalin de ni un paso atrás?....
De cualquier modo, se debía seguir adelante. Según nos contaban los lugareños, la Rasputitza, como se llamaba a la época de lluvias nos daría todo el tiempo del mundo para detenernos y descansar….. calados hasta los huesos, eso si….
La semana había sido dura, muy sangrienta, los acontecimientos nos estaban enseñando como iban a ser los padecimientos futuros del maldito frente del este.
Esta es una nación de demonios, ¿que maldito país aguanta este castigo sin derrumbarse?. Tal vez vayan a ser necesarias más de una patada para derribar la puerta del podrido edificio soviético.
Querida Eva
Se que has sabido de la muerte de Edhart, Hans y el bueno de Grüber, lo más desesperante de todo es que no pudimos dar sepulturas a sus cuerpos, es posible que hoy me encuentre más decaído de lo que debiera un oficial de las waffen SS, sin embargo también soy humano. Todos esos hombres caidos por el Reich, eran como hermanos, eran mi familia y me los han arrebatado estos malditos. Sé que no debo decirte esto amor, pero cada día que pasa en este maldito país abandonado de la mano de Dios, siento que me va a ser muy complicado cumplir la promesa que te hice. Dale a la señora Grüber los pocos efectos personales de su hijo asi como la condecoración que le fue impuesta a título póstumo…. Es el mejor homenaje que podemos hacerle.
Te quiere tu Hubert